La provincia de Zaragoza tiene mucho encanto: desde una rica gastronomía hasta pueblos “de postal”, mucha historia y paisajes increíbles. Así que este puente te proponemos viajar por la provincia y descubrir lugares “de cuento”.
A continuación te dejamos cuatro razones por las que tienes que viajar por la provincia de Zaragoza estos días, un plan diferente en el que descubrir los paisajes y pueblos maravillosos que tiene Zaragoza.
1. Zaragoza, un cruce de culturas e historia
Primera razón y muy importante, Zaragoza tiene magia. Nuestra provincia nos ofrece viajar a lugares fascinantes y con siglos de historia, como numerosos pueblos medievales repletos de encanto: Sos del Rey Católico, Anento, Uncastillo… y así hasta un sinfín de pueblos que enamoran a sus visitantes. Zaragoza es un cruce de civilizaciones y culturas que han dejado su huella en todo el territorio y eso se nota.
2. Gastronomía local con seña de identidad
La riqueza de la gastronomía local es algo que destaca. Vayas donde vayas, la gastronomía en Zaragoza es un aspecto fundamental para el turismo. Podrás disfrutar de un sinfín de productos de la tierra y recetas típicas de la zona que te dejarán maravillado con alimentos como la borraja, el ternasco o las migas. Hay para todos los gustos, una auténtica delicia.
3. Tierra de balnearios y naturaleza
Zaragoza es tierra de balnearios. No hay mejor plan que relajarse y olvidarse de todo en las aguas termales de un balneario y en nuestra provincia hay mucho donde elegir. Además, desde el 20 de agosto y hasta el 4 de septiembre comienza en la zona de balnearios de Zaragoza (Nuévalos, Alhama de Aragón, Ibdes, Jaraba, Paracuellos de Jiloca y Ateca), el ciclo ‘En torno al agua’, danza, música y teatro en directo en un entorno idílico.
Y, si te apasiona la naturaleza, los paisajes que descubrirás son de infarto, rutas por el Moncayo, el Monasterio de Piedra o los Cañones del Río Mesa, entre otros espacios increíbles.
4. Ruta por la obra y vida de Goya
Si eres un apasionado de la pintura y el arte, este es tu sitio, ya que Francisco de Goya, el pinto más universal, nació aquí. Concretamente en Fuendetodos, un pequeño pueblo a 40 km de Zaragoza en el que es posible visitar su casa natal y el Museo del Grabado con algunas de sus obras. Además, Calatayud acoge en la iglesia de San Juan el Real las pechinas que pintó el genio con el tema de los Santos Padres.
También La Cartuja de Aula Dei, a escasos kilómetros al norte de Zaragoza, alberga obras de su etapa juvenil siendo magnífico el conjunto de frescos que delatan armonía, elegancia en los pliegues y el toque enérgico de Goya.
Igualmente, en la capital aragonesa encontrarás numerosos espacios donde poder contemplar la obra del pintor y recorrer sus pasos en la ciudad: el Museo Goya, la Basílica del Pilar, Museo de Zaragoza y Alma Mater Museum.