El mal tiempo y que las fiestas se han concentrado en fin de semana han provocado una caída del consumo en restauración y un descenso de visitantes en el sector alojativo
A pesar de las buenas perspectivas que barajaba la asociación, la mayoría de los restaurantes consultados ha registrado un descenso en su facturación con una caída media de cerca del 25%
El balance de las fiestas del Pilar 2024 para hosteleros y hoteleros de la capital aragonesa no ha sido tan positivo como se esperaba. El mal tiempo y que el día grande fue en sábado han provocado un descenso acusado del consumo en restauración y una disminución del porcentaje de visitantes en el sector alojativo, que se ha hecho notar en el resultado final. Como dato, con respecto a ediciones anteriores, el 82% de los restaurantes consultados ha registrado un descenso en su facturación con una caída media de cerca del 25%, según refleja una encuesta realizada por Horeca Restaurantes Zaragoza a sus socios.
Para evitar esta situación en el futuro, Horeca Hoteles y Restaurantes Zaragoza solicita que se añada o traslade un festivo local flexible que garantice 3 ó 4 días de puente todos los años, como ocurre en otras ciudades. Esta medida favorecerá, sin duda, el disfrute de las fiestas y la atracción de visitantes durante más días. Asimismo, la mayoría de los establecimientos consultados considera que es necesario programar más actividades en la ciudad, tanto en el centro como en los barrios, para recuperar el ambiente festivo en las calles que, en esta ocasión, se ha deslocalizado a otros puntos, lo que también ha afectado de forma negativa a su facturación.
No obstante, Horeca Zaragoza pone en valor la recuperación de las grandes vías de la ciudad para el disfrute de los ciudadanos, lo cual ha sido definitivo para evitar una caída más dramática de las ventas en los locales de hostelería del centro. Así, según la encuesta, cerca del 65% de los establecimientos considera que los espacios de venta de comidas y bebidas que se autorizan hacen disminuir la facturación.
De esta manera, Horeca Zaragoza defiende al sector frente a la competencia desleal de espacios gastronómicos, que se habían convertido en restaurantes camuflados en el centro de la ciudad que operaban sin garantizar los niveles sanitarios exigidos que se requieren a los establecimientos de restauración.
